¿Tú recuerdas, hijo mío
cuando de pequeño
me pedías una estrella?
Mamá te la prometió.
Un día fuimos al campo
Y allí el milagro surgió.
Recorté mil estrellitas
De plateado papel.
Las guardé en mi bolsillo.
Esperamos al atardecer.
Cuando llegó la noche
te dije con ilusión:
“cierra los ojos muy fuerte”
…¡y el milagro se cumplió!
Tiré las estrellas en alto
Y tus ojitos se abrieron
De tan grande inocencia
Y todo fue una sorpresa.
No te diste cuenta
Que mamá las recortó.
Ese fue el milagro.
El milagro del amor…
¡Qué poder tiene una madre!