sábado, 16 de julio de 2011

LLUVIA


¡Lluvia, qué poder tienes,
Qué magnetismo ejerces
Sobre mi destino!

De pequeña al ver las nubes
Esperaba con paciencia,
Aguardaba en silencio

Que cayeran las gotitas,
Que lento me empapasen,
Que cayeran sobre mí.

Mojada hasta los huesos
En los charcos yo jugaba,
mi madre me regañaba:

-“¡Esta niña está loca!”
Pero yo seguía y seguía
Porque así era feliz.

Y la lluvia ha seguido
Siendo mi amiga más fiel
Me acompaña donde vaya.

En los momentos amargos
Y en los alegres también,
Algo tenían las nubes…

De niña las contemplaba
Hora tras hora asomada
A solas en mi ventana.

Hoy soy mayor
Y la lluvia aún me fascina:
Cuando llueve alguien me llama.